¿Qué son las aftas orales?
Son lesiones redondas u ovaladas de color blanco o amarillo, rodeadas por un borde rojo. Las aftas se encuentran entre las lesiones orales más comunes, no son contagiosas y suelen aparecer en las encías, paredes opuestas a las mejillas, labios y la lengua
¿Qué síntomas y molestias pueden causar?
Las aftas son muy dolorosas y pueden causar dificultad para que los niños puedan alimentarse e hidratarse adecuadamente. En ocasiones, suelen acompañarse de fiebre, faringitis y ganglios linfáticos inflamados
¿Cuál es el tratamiento para las aftas?
En la mayoría de los casos, el dolor disminuye en un 1 o 2 semanas. En casos de aftas muy grandes y que generan mucho dolor, se recomienda el uso de analgésicos, gel de aloe vera, ácido hialurónico y violeta de genciana
Se debe acudir al odontopediatra si se presentan:
Aftas recurrentes, que aparezcan después de que sanan las anteriores. Dolor que no se pueda controlar, fiebre alta junto con las aftas y si se tienen superficies de dientes filosas o aparatos dentales que parecen provocar las aftas
Recomendaciones de la especialista:
- Practicar buenos hábitos de higiene bucal, realizando un buen cepillado después de cada comida y usando el hilo dental una vez por día
- Seguir una alimentación saludable, que conste de una dieta rica en vitaminas, con frutas, vegetales y cereales integrales
- Si su niño tiene aftas, debe tener una correcta hidratación, evitando el consumo de alimentos cítricos, calientes y salados Además, no se dejará de cepillar los dientes al menor, pero se hará con más cuidado para evitar rozar la zona del afta y generarle dolor, usando un cepillo suave a fin de prevenir la irritación de los tejidos. Una adecuada higiene oral favorecerá la cicatrización y evitará una inflamación gingival